Barcelona .- Este lunes se pone en marcha la renovación de la calle Major de Sarrià. La transformación de esta vía del distrito de Sarrià-Sant Gervasi prevé convertirla en plataforma única para dar más protagonismo al peatón, consolidar su carácter de calle de casco antiguo y mejorar la calidad urbana del espacio público.
El proyecto se ejecutará en el tramo de calle comprendido entre el paseo de la Bonanova y la calle del Instituto Químico de Sarriá, y también englobará la calle Pare Miquel de Sarrià. En total, se actuará sobre una superficie total de 3.498 metros cuadrados. Se invertirá un total de 2,59 millones de euros (IVA incluido), y está previsto que las obras acaben a los diez meses.
Con la reforma, la calle Major de Sarrià dejará atrás el estado actual de aceras estrechas y calzada con aparcamiento lateral para pasar a ser de plataforma única. Habrá una franja central al mismo nivel de las aceras -más anchas que las actuales- que formarán un conjunto único que priorizará los desplazamientos a pie y el paseo.
En este espacio se permitirá la velocidad reducida, el paso de vehículos de servicios y las bicicletas. No obstante, se eliminará el aparcamiento en superficie y las zonas de carga y descarga se restringirán a ámbitos muy determinados, lo que permitirá habilitar espacios peatonales mucho más amplios y agradables.
En el chaflán con la avenida de la Bonanova, se creará una gran acera que ampliará la boca de la calle y convertirá el espacio en una pequeña plaza que dará continuidad a la plaza de Sarrià. Con respecto a la calle del Padre Miquel de Sarrià, se reurbanizará con una imagen en consonancia con la del Major de Sarrià, también con carácter de casco antiguo.
Las actuaciones prevén ordenar los servicios y renovar el mobiliario urbano, como las papeleras, fuentes, bancos, etc. Y se plantarán más árboles que los que hay actualmente, concretamente cerezos de Japón, para reforzar el verde de la calle.
En cuanto al tráfico, habrá un cambio de sentido entre las calles IQS y Margenat para rebajar el tráfico en este tramo, ya que es un camino escolar y se pretende mejorar la seguridad de los peatones. A raíz del cambio, el bus de barrio 130 pasará por la calle de Margenat, y se ubicará una parada cerca del CAP de Sarrià. Además, habrá nuevas paradas en la Vía Augusta, a la altura de la calle Químico de Sarrià, y dos más en General Vives y al inicio de la calle Major de Sarrià.
Las obras provocarán un corte total de la calle, excepto vados y peatones, y la afectación comenzará el tramo comprendido entre Santa Magdalena Sofía y IQS. Las futuras afectaciones serán comunicadas debidamente para minimizar las molestias que le puedan ocasionar. /AB